Las plegarias atendidas que lograron a sangre fría un diamante Tifany´s


Abusando un poco de esta sección me atreví a hablar de una de mis películas favoritas, de esas que las chicas vemos en casa bote de helado en mano, cuyo título en español es “Desayuno con diamantes”, personalmente me gusta más en ingles que sería “Breakfast at Tiffany´s”, protagonizada por Audrey Hepburn y George Peppard, la manera en que ambos actores dotan de atributos emocionales un estilo de vida y resaltan la icónica joyería Tiffany’s sin duda marcaron el estilo de los años 60 que aún hoy es su digno representante.
Envuelta en la investigación di con el autor de la novela original Truman Capote quien no pretendía en lo más mínimo darle estilo alguno al glamour de los años 60 o crear una comedia romántica sabor a café y donas sino más bien hacer una crítica directa contra las clases sociales más acomodadas y de lo que ciertas personas son capaces de hacer para obtener un lugar entre estos.
Truman Capote escritor que se iniciaría como tal partiendo de lo que él mismo lo ha denominado "un estilo de ver y oír" sin antecedente alguno sobre grandes literatos o lectores, un día, según dice, se dio cuenta que solo le interesaban cuatro cosas de la vida: leer libros, ir al cine, bailar claqué y hacer dibujos.
Este interesante personaje y su inata vocación le abrieron camino para escribir variadas e importantes obras pues su estilo realista, su preocupación por perfeccionar su estilo y sus relaciones con singulares personajes que van desde modelos, políticos e incluso psicópatas con los que entablo una amistad los suficientemente sólida para escribir una de sus tantas novelas “A sangre Fría” más allá de la ficción quizá cruzandola y mostrando de forma crocante la manera en que un hombre es acecinado.
Luego decidido escribir otra gran obra que lo catapultara al éxito de público pero también de crítica, tomo lo que mejor conocía: el ambiente sofisticado de las clases altas que había frecuentado en esos años. Sería un análisis del pequeño universo -entre aristocrático y mundano- de la sociedad acaudalada de Europa y de la costa este de los Estados Unidos. Sin embargo “La Côte Basque”, fue una obra que desató el escándalo: la mayoría de los amigos que tenía lo condenaron al destierro por contar historias apenas disfrazadas sobre ellos. Luego de la publicación de los siguientes dos capítulos, "Monstruos Perfectos" y "Kate McCloud", Capote abandonó “Plegarias Atendidas” novela qua comenzo por contrato 1966 y tenía por fecha de entrega el 1 de enero de 1968; sin embargo la fecha de entrega sería pospuesta varias veces, primero hasta 1973, luego a 1974, 1977 y por fin a 1981.
“Música para camaleones” el último libro de Capote que incluye una muestra miscelánea de todas sus facetas como escritor resulto una obra carente de calidad tal vez por la inmersión de Capote en el alcohol y la droga, aun más en ese último período, en el cual, su editor, pensaba que su talento literario estaba decayendo y no conseguía terminar “Plegarias Atendidas” luego de su abandono en 1976. Esto sumado al trauma de la investigación de “A sangre fría” y el abandono de la mayor parte de sus amigos luego de la publicación de “Kate McCloud” en 1976 debe haber causado una fuerte impresión en Capote, quien confesaba odiar los abandonos.

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