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No hace mucho tiempo alguien me decía que la pasión es sinónimo de muerte, solo porque una se desgarra de felicidad hasta esparcirla por todas partes o decide autodestruirse ante el objetivo no conseguido. Cualquiera que fuese la razón siempre que es con pasión termina con la razón y con la existencia física. Me explicaban aquella vez que para el arte y sus manifestaciones se requiere de pasión para entenderlo, para vivirlo y expresarlo, que en ocasiones la emoción es tan intensa que de ahí es que se resuelven tantos artistas de casi cualquier disciplina fallecidos prematuramente por excesos o suicidios. Supongo que es difícil dejarse llevar por la pasión y no desbordarse a esos niveles. Habremos de cuidarnos de nuestra correspondiente empresa. En torno a la pasión de la interpretación teatral y cinematográfica es que transcurre esta nota pues me tope con una bella y buena actriz que a escasos 48 años perdió la vida consecuencia de un exceso de barbitúricos, comprenderán que a estas al

A 45 Km. de la ciudad de Mérida, para mayor precisión en Abalá se encuentra una de las mas esplendidas haciendas, muestra del esplendor de le época henequén era de Yucatán. En su momento fue una de las más importantes productoras de henequén de la región, hoy en día gracias a la genialidad de los arquitectos especialistas en investigación histórico-documental, ha sido adaptada a la modernidad, para convertirse en un hotel de gran turismo, eso si manteniendo la forma, la orientación, calidad de luz, dimensiones y proporciones de cada área. De su tiempo mantiene algunas máquinas procesadoras de henequén para que el visitante tenga el placer de imaginar al menos el arduo trabajo que requería el henequén en aquellos tiempos, también posee piezas restauradas de la época en su mueblería, especialmente del tradicional bejuco y ratán, además de las combinaciones de madera y piedra, así como textiles ligeros en fibras de algodón. Procedentes en su mayoría de Europa, cruzaron primero en barco, p